Yodo en bebés veganos

El Yodo en la alimentación se encuentra principalmente en forma de yoduro, con mayor contenido en animales marinos y algas. El contenido de yodo en los vegetales se ve muy afectado por la capacidad de estos para absorber dicho mineral y por la composición del suelo. El consumo de huevos y productos lácteos también puede contribuir a la ingesta dietética de yodo, dependiendo de la alimentación del animal. En los países industrializados, el uso de sal yodada como condimento es una fuente importante de yodo.

Pero cuando hablamos de bebes veganos, nos encontramos muy limitado el consumo de yodo, prácticamente en exclusiva en la leche materna, la leche de fórmula, algunos cereales fortificados y la sal yodada.

Los cereales fortificados no suelen ser buena idea si están dextrinados (las típicas papillas de cereales) o contienen azúcares añadidos. Los bebés y niños pequeños no deben consumir algas por su elevadísimo contenido en sal, así que la opción más certera es añadir una pizca de sal yodada a partir del año cada día, y en caso de reducirse mucho la toma de leche materna o artificial en torno a los 9-10 meses, adelantar a entonces su aporte a esa edad.

Alguna vez me han consultado el consumo de agar-agar, habitualmente en recetas veganas… mi recomendación es no iniciarlo antes de los 18 meses y no abusar de ello, ya que no es fácil saber la cantidad exacta de yodo que llevan los sobres de agar-agar comercializados.

De todas maneras, si aun tienes dudas sobre el yodo o sobre la alimentación de tu bebé vegano, puedes contactar conmigo y resolverlas en consulta.

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